21 de marzo de 2021

Patricio Elías Guzñay Lema. Santo Domingo de los Tsáchilas, Ecuador. IDDR3 - CONACCE.
El acto de entrelazar los hilos e ir avanzando hacia el diseño esperado para obtener un producto; figurativamente las personas cuando se entrelazan cada uno aportando con sus perspectivas, conocimientos, etc., así juntos a desarrollar proyectos en bien de una persona y la sociedad misma como un gran tejido de colores.

Los proyectos individuales o colectivos con un propósito claro y con la ayuda favorable de uno o varias personas, siempre conllevan un gran beneficio de nosotros mismos y/o la ayuda externa; es así que pasar un hilo repetidamente y con distintas combinaciones se va logrando pequeñas mallas hechas con él mismo para formar un tejido.

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Formar ese tejido de amistades, apoyos, sustentos, para que en su momento esta ayuda mutua, se produzca la interacción al igual de un feed back (retroalimentación) entre quien recibe la ayuda y quien la da, intercambiándose continuamente los roles en una cooperación y solidaridad conjunta.

En el mundo de la educación existen muchas idea (hilos de colores) que son establecidos en proyectos para ser desarrollados pero en ocasiones son dejadas en un baúl por no contar con la ayuda o el soporte de una o varias personas alrededor, pero la aspiración en su momento es que se pueda ir unificando los hilos, entretejiendo los mismos y poder poco a poco ir logrando el gran tejido en bien de la educación de todos.

La aspiración humana y su organización debe estar encaminada a crecer y tejer esfuerzos en pos de los proyectos compartidos, propiciando en cada una de las escuelas, colegios, universidades y toda institución de estudios que comparten las mismas ideologías de una educación unificada, libre, accesible y de bien para todos. Aportando a desarrollar experiencias, logros, y compartir frustraciones, para que nadie pueda sentirse solo, y entre todos hallar el mejor camino; entonces hablar de ayuda mutua requiere de motivación, de responsabilidad y de esfuerzo individual e institucional, que se robustece con el de otros.

Pero ante estos tiempos y los venideros se denota la falta de este principio de colaboración el valor de ayudar, de interactuar en bien de la educación, puesto que los hombres y las mujeres, los niños y las niñas, aprendan a tejer juntamente con otros para buscar un mismo fin y/o proyecto.

Para desarrollar los fundamentos de este valor, es necesario enseñar, ejemplificar, y realizar actividades y variadas acciones, que permitan que cada individuo desarrollo en sí mismo el compromiso de aportar a otros, saber coordinar acciones para poder realizar trabajos en conjunto, y simplemente prestar ayuda a otros sin buscar beneficios individuales, para realizar un fin común, o simplemente sentir la alegría colectiva por obtener un logro individual o general, el defender a los compañeros y ayudarlos cuando se encuentren en necesidades, debe ser una iniciativa propia sin esfuerzo o solicitud de otro.

La cooperación y ayuda mutua debe ser enseñada desde las primeras edades, desde el hogar y en las instituciones educativas, dando como resultado un profesional u docente con fundamentos de aporte y no en una vida de egocentrismo que tiende a quererlo todo para sí; pudiendo hacer acciones a favor de los demás y dejando de lado los individualismos, caminando en busca del bien colectivo.

EL trabajo en conjunto de los docentes en un proyecto individual, debe ser con comportamientos favorables a establecer una relación de ayuda mutua, siendo los docentes los mayores ejemplos ante los demás, y que posteriormente los mismos estudiantes, sociedad civil, puedan imitar las acciones de cooperación y unificación, produciendo conductas que desarrollen no solo individuos sino una sociedad de cooperación entre todos.

No obstante, el entretejer estos hilos de unión, de diversidad e ideologías, será un trabajo cotidiano de cada docente, nada fácil al inicio y que requerirá de mucha paciencia y comprensión, a la vez para lograr desarrollar todos los proyecto y no solo particularidades de uno; demostrando así que los valores fundamentales y principios de cada ser humano están desarrollados en los hilos de unión, cooperación y ayuda mutua.