6 de marzo de 2020

César Vicente Benavides Torres
“El mundo no sólo requiere maestros que enseñan lo que saben sino también maestros que sospechan de lo que saben y de la manera como lo enseñan; y que por esa sospecha analizan su quehacer constantemente. (…) la manera de comunicar el saber, pero, ante todo, la reflexión crítica, racional y argumentada del mismo es lo que verdaderamente dignifica, orienta y da sentido a la educación” (Restrepo, 2008).

Es usual que el maestro cierre las puertas del aula donde va a desarrollar sus clases. Razones como evitar la contaminación acústica e impedir interrupciones, son válidas, pero también podría ser un hábito para no indagar sobre lo que sucede en el aula, tal vez, porque se está inseguro de lo que se hace y de cómo se lo hace.

La idea central de la “MIRÉMONOS” COMO OFRECEMOS NUESTRAS CLASES, es permitir que, en primera instancia, algunos colegas (los más cercanos, los más amigos) observen la clase para luego, en un diálogo sincero y propositivo, establezcan logros y consideren oportunidades de mejora, con el ánimo de alcanzar cada vez clases más motivantes, más creativas, que desarrollen aprendizajes sustentables. Los maestros con su experiencia y su sapiencia son los más indicados para aprender de sus pares y crecer juntos.

La clase es un proceso inacabado, que debe estar en permanente reconstrucción, que no es verdadera, que es falible y, por ello, requiere validarse permanentemente. La clase concebida como hipótesis de trabajo debe ser validada por otros maestros, con otras miradas desde lo colaborativo, para ascender en espiral hacia la clase “ideal”. Al no ser cuestionada, la clase corre el riesgo de hacerse dogmática. Para ello, se debe considerar el salón de clases como un aula abierta y permitir que otros maestros observen y reflexionen sobre las diarias prácticas educativas diarias que en su gran mayoría pasan sin ninguna evaluación.

Comunidad de Educadores: Un espacio para visibilizar el pensamiento de los docentes

La Red Iberoamericana de Docentes (42.000 miembros) quiere aprovechar la gran visibilidad que tiene sus blogs, tanto en la Red como en abierto, y va a iniciar una etapa en la que se van proponiendo temas de interés para la profesión docente que se actualizarán cada dos meses y que serán revisados por nuestro Comité Académico con el compromiso de hacer un retorno de todo lo recibido. Los docentes que a lo largo de 2020 publiquen un mínimo de 5 artículos recibirán un certificado acreditativo. El registro en esta acción es libre y gratuito y las entregas se harán a través de una plataforma Moodle para tener un control y las herramientas de evaluación adecuadas. Los datos que se solicitan son los necesarios para emitir, en caso de haberlo logrado, los certificados. Registro en: https://forms.gle/ssatywJomDsff2T27

Y en 2020 estamos haciendo entre todos el Año Iberoamericano de la Cultura Científica

“MIRÉMONOS” COMO OFRECEMOS NUESTRAS CLASES, es una metodología que permite a un equipo de maestros involucrarse en un proceso de investigación pedagógica al reflexionar sobre las estrategias de enseñanza y aprendizaje más eficientes y pertinentes a cada contexto, con el fin de alcanzar un mayor desarrollo profesional como docentes. Es una metodología que intenta reducir la brecha entre lo que se planea y lo que realmente sucede en clase.

Para responder a la pregunta “¿Cómo “dictamos” clase los maestros?”, se debe hacer una buena observación y una buena escucha de las clases, disparando la reflexión crítica de los actores comprometidos para evaluar lo que sucede en el acto educativo. Observar una clase por propios y extraños es la mejor metodología colaborativa para romper con la rutina pedagógica y crecer en didáctica a partir de nuestros saberes.

Por ello la “MIRÉMONOS” COMO OFRECEMOS NUESTRAS CLASES, es una hipótesis a comprobar que debe llevar a los maestros a indagar sobre lo que sucede en el aula de clase, a examinar sobre lo que saben, a sospechar sobre lo que lo hacen y sobre lo que aprenden los estudiantes.