Blanca Ruby Orozco Mera
Santiago de Cali, Colombia
Comunidad de Educadores de la Red Iberoamericana de Docentes.
La Educación Matemática como disciplina científica se aborda desde diferentes contextos educativos, en el caso particular del aula de clase uno de sus elementos de abordaje es el estudio de su estructura estratégica como modelación a seguir para el desarrollo del proceso de aprendizaje de las matemáticas.
El desarrollo de las matemáticas en el transcurso de la historia ha dado cuenta de las múltiples relaciones entre las matemáticas y el mundo real (Posada, F.& Villa, J., 2006, p.5). En las últimas décadas esta relación ha cobrado vital importancia, materializándose especialmente en el campo educativo mediante el proceso denominado modelación matemática.
Es de atender aportes como los de Posada, F.& Villa, J., (2006) cuando dicen que, si la modelación hiciera parte del proceso de formación inicial de todo docente, tendríamos más docentes capacitados para implementarla en su práctica pedagógica y así se priorizaría el desarrollo del proceso de aprendizaje generador de estudiantes críticos y reflexivos, capaces de aplicar los conocimientos matemáticos fuera del salón de clases.
La modelación hace parte de nuestra vida cotidiana sin importar edad ni nivel de escolarización, a todo momento se experimenta la necesidad de la praxis, del pensamiento lógico, por ende, matemático, exigible ante interpretaciones, deducciones y validación de situaciones que la realidad de convivencia y avance de la misma ciencia presenta en su nivel e interdisciplinariedad. Luego el docente está llamado a pensarse el cómo y cuándo utilizar las estrategias adecuadas para en su labor explorar las experiencias del mundo matemático en la cotidianidad.
la modelación matemática es más que una ecuación lineal o expresión gráfica, es la capacidad de un ser humano al desarrollar su praxis ante la solución de una situación analizada bajo un comportamiento a veces intuitivo pero productivo por la aplicabilidad modelizada matemáticamente que toma los planteamientos de la vida real y los convierte en problema matemáticos para darle solución desde la verdadera comprensión y exactitud de comportamiento ante las ciencias.
Las habilidades y estrategias que el docente puede llegar a explorar y ejercer ante la modelación lo más similar a la cotidianidad de su estudiante le permite a este la comunicación efectiva matemática reflejada al procesar y argumentar soluciones a comportamientos matemáticos sin descuidar la validación de lo planteado o hipotizado no solo por la expresión matemática como tal sino con su correspondiente análisis parafraseado acorde a la modelación, pues es una estrategia que permite en un proceso de aprendizaje y aplicabilidad la optimización de tiempos, la asertividad en panoramas de diversas perspectivas tanto de la cotidianidad como de la alfabetización científica académica.
Entre los elementos que permiten reflexionar sobre el proceso de modelación como estrategia didáctica para abordar la construcción de conceptos matemáticos en el aula de clase el docente debe tener presente que tanto él como su estudiante están llamados a crear hipótesis ante la observación que le exige preparar su proceso modelando la posible solución a validar con el paralelo de las argumentaciones parafraseadas más que escritas en solo lenguaje matemático.
El seguimiento de la modelación matemática permite tanto al docente como al estudiante experimentar la estructura de su clase en el aula dando relevancia a las concepciones alternativas que se poseen entre actores educativos, situándose como puntos de partida que pasan a dar beneficios al proceso de aprendizaje incentivados en el aula de clase al dar espacios modelando comparativos acordes a experimentaciones, momentos vivenciales, empíricos y/o de atención histórica y fundamentación conceptual.
La matemática como toda ciencia exige asumir un proceso de aprendizaje desde una mirada sociocultural, reconociendo que la ciencia no es la verdad finalizada, porque el tiempo al transcurrir le ha permitido al hombre observar, hipotizar y continuar la modelación concurriendo a la validación que en muchas ocasiones le conduce a la complementación o construcción a partir de interpretaciones que los científicos hacen de la realidad, es así que los comportamientos no son todos absolutos y si bien la ciencia tiene mecanismos para garantizar su rigor, está sometida a revisiones y cambios constantes. (Veglia,2007).
El docente en su labor pedagógica esta llamado a responder y realizar relaciones de contenidos con experiencias de la vida real, al abordar cualquier temática debe considerar su planeación a desarrollar incluyendo momentos motivacionales, contundentes a respuestas emocionales y desarrollo de destrezas para resolver situaciones con espíritu crítico y reflexivo; además de tener en cuenta la modelación vincular las competencias de integralidad, tecnología e investigación para propiciar significativos escenarios de aprendizaje y construcción, pues la modelación matemática entabla comunicación efectiva para con las demás disciplinas y ciencias, construyendo diversos modelos y por ende conceptualizaciones que conllevan a entender los fenómenos de la naturaleza y el avance científico.
“No es el conocimiento, sino el acto de aprendizaje, y no la posesión, sino el acto de llegar allí, que concede el mayor disfrute”. – Carl Friedrich Gauss
