9 de junio de 2022

Anderson López
Estudiante de Educación mención Ciencias Pedagógicas sede Caracas. Cursante de la cátedra de Pedagogía Comparada
Alumna de Claritza Arlenet Peña Zerpa. Comunidad de Educadores de la Red Iberoamericana de Docentes.
El presente texto, resulta un acercamiento a partir de una mirada crítica, reflexiva y consciente que apunta a criticar todo tipo de adoctrinamiento en torno a las políticas de educación sexual.

Palabras clave: Educación, ideología, diversidad, educación sexual.

 La educación sexual nunca ha dejado de ser un tema de interés social, se ha globalizado y esto es un hecho innegable. Con todas las ventajas y desventajas que esto supone, el caudal de información es enorme. Es necesario enseñarle a los jóvenes estrategias vitales que le ayuden a pensar, discernir y discriminar la información masiva por el hecho de estar inmerso en el ámbito biológico, científico, afectivo y moral del ser humano. Forma parte de nuestras relaciones con el otro, está inmerso y permea en cada ser humano.

No cabe duda que las personas LGBTIQ 1 (lesbianas, gays, bisexuales, trans, interex y queer) a lo largo de la historia han sido grupos vulnerados. Sin embargo, actualmente existen políticas que han reconocido y asegurado los derechos e igualdad real en todos los habitantes. Aún así, el cambio debe reflejarse en las prácticas culturales e institucionales. Pero, ¿cómo abordar estos temas de manera adecuada en el ámbito de la Educación?

 En algunos países con programas de educación sexual los documentos oficiales del Ministerio de Educación no especifican cuándo o en qué punto del periodo evolutivo se puede abordar el tema de la diversidad sexual. Siempre ha quedado a criterio de la institución educativa. Por lo general, suele abordarse en educación secundaria.

  Actualmente existen en algunas naciones como Argentina leyes que garantizan el derecho pleno a la identidad de género, matrimonio igualitario, por ejemplo. Pero, en materia educativa, pareciera estar sucediendo (de acuerdo a videos compartidos en redes) y algunas experiencias cierta preferencia por la ideología de género en las escuelas.

 La Educación Sexual Integral (ESI) 2 concentra ideología de género. El poder legislativo de dicho país, reformó la ley integral, una especie de ataque a la libertad educativa para llevar a cabo la mencionada ESI. Haciendo una serie de cambios que irrespetan el ideario institucional como lo menciona el Art. 5 de dicha ley. Asimismo, los padres no tendrán elección en cuanto a la Educación sexual de sus hijos, ya que ningún colegio podrá tener un ideario distinto al del Estado. Así la ESI se trasforma en un instrumento estatizante de la sexualidad, que no permitirá ninguna visión diversa respecto a la del propio Estado. Por lo tanto, se hará de la ley ESI, una ley de orden público, lo que significa que ningún contrato privado podrá rehuir de los dictados estatales.

En el Art. 26 inciso 3 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos 3 indica que los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.

 En el Art. 18 inciso. 4 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos se señala: “los Estados partes en el presente pacto se comprometen a respetar la libertad de los padres y, en su caso, de los tutores legales, para garantizar que los hijos reciban Educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”.

Estas medidas no aseguran los Derechos Humanos de los padres de familia, conforme a sus valores y convicciones, Derechos Humanos que están protegidos por los numerosos pactos internacionales que en Argentina tienen rango constitucional.

En el Art. 13 inciso 3 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales se indica: “se comprometen a respetar la libertad de los padres, y en su caso, de los tutores legales, de escoger para sus hijos o pupilos escuelas distintas de las creadas por las autoridades públicas, siempre y cuando que aquellas satisfagan las normas mínimas que el estado prescriba o apruebe en materia de enseñanza. De esta manera, podrán hacer que sus hijos o pupilos reciban la Educación religiosa o moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”

 Ahora bien, es crucial distinguir qué sería una Educación sexual. Debemos entender que la sexualidad humana es sumamente rica y diversa, debido a que consta de varias dimensiones: la biológica, cultural, afectiva y moral. Una Educación sexual seria, rigurosa, científica y sobre todo respetuosa de los valores y convicciones de los demás, es aquella que educa y se abstiene de preferir doctrinas particulares e ideológicas para los niños.

 Enseñarles a los niños la anatomía del cuerpo humano, la fisiología de la sexualidad humana, cómo evitar enfermedades de transmisión sexual y cómo evitar embarazos no deseados, están dentro de los contenidos indicados por la UNESCO. Todo ello, constituye una “correcta enseñanza” de la educación sexual. Por el contrario, cuando se impone ¿cómo valorar lo sexual?, ¿qué pensar sobre lo sexual?, ¿qué creencias se tiene sobre ello? En ese momento, estamos abandonando lo científico-cultura-afectivo y prefiriendo en función de fundamentalismos (asociados a la sexualidad).

 Toda ley 4 que esté en contra de los prejuicios y la discriminación en ámbitos educativos será siempre bien recibida, sobre todo aquella que promueva el respeto ante todo. Pero si las guías, manuales y programas de Educación sexual, no corresponden a un discurso biopsicosocial sobre nuestra sexualidad, sino una doctrina particular ¿se está ofreciendo la posibilidad a los padres de elegir? Resulta evidente que la educación sexual fundada en ideologías más bien pareciera cuestionar y deconstruir la sexualidad. Los niños no son propiedad de los políticos ni de los estados.

 En Venezuela 5 no se evidencia grandes avances respecto al tema, aún así, en algún momento tomarán en cuenta la educación sexual. Según Sánchez (2021)6 los docentes en Venezuela se limitan a enseñar sobre la sexualidad e identidad de género partiendo de la heteronormatividad como premisa para describir las relaciones interpersonales, amorosas, sexuales o reproductivas. Recordemos que, Venezuela se apega a las recomendaciones y prácticas desde lineamientos en torno a la salud. 

 Con todo lo descrito anteriormente no pretendo que limitemos el desarrollo sexual a la genitalidad sino más bien, desde una visión completa sin preferencias ideológicas en el que se pueda contribuir a una verdadera educación sexual para el desarrollo de los jóvenes.


1 Género, Derechos y Periodismo. Guía para la cobertura mediática de la identidad de género y la diversidad sexual. Recuperado de: Identidadydiversidad.adc.org.ar

3 Declaración Universal de Derechos Humanos. (1948) Asamblea general en su resolución 217.

4 Diversidad sexual e identidad de género en la educación. Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación. 

6 Ver Sánchez, F. (26 de octubre de 2021). Educación sexual y de género: Una asignatura pendiente dentro del sistema educativo nacional. El Diario. https://www.google.com/amp/s/eldiario.com/2021/10/26/educacion-sexual-genero-venezuela/